Acompañada por su madre, Karin Doidl; sus hijos, Alexandra y Javier Burillo; su pareja, Alfredo Brener; y una larga lista de invitados VIP, Alejandra y todo el patronato de esta asociación que fundó hace casi 20 años, estuvieron presentes en la decimoctava gala anual.
El Colegio de Las Vizcaínas en el Centro Histórico de la Ciudad de México fue la sede de esta fiesta que inició con una cena en la que destacaron los Camarones con vinagreta de chipotle, el Ceviche peruano de robalo, un Caldo de cola de res con mini ravioles y el Filete de res en salsa de balsámico.
Memo Martínez fue el encargado de dirigir la divertida subasta en la que participaron los más de 400 invitados.
Gran parte del entusiasmo durante esta subasta se debió a que todo lo recaudado se entregó directamente a la fundación.