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Con el estreno de la película Bohemian Rhapsody, muchos esperaban conocer los detalles más sórdidos sobre la vida de Freddie Mercury, sin embargo, no fue así. Las fiestas salvajes quedaron limitadas a un par de escenas after parties con botellas vacías y restos de cocaína en una mesa.
Sin embargo, algunas de las mejores historias sobre Freddie no fueron mencionadas en la película protagonizada por Rami Malek.
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De fiesta con Diana de Gales
Es una de las anécdotas más famosas, la princesa de Gales, el vocalista de Queen, el cómico Kenny Everett y la actriz Cleo Rocos se encontraban compartiendo una tarde de champán y repeticiones de Golden Girls. De acuerdo como lo narra Rocos en su libro El poder de la bebida positiva, decidieron salir por la noche y Diana quiso unirse aunque le aconsejaron lo contrario. “Dejen que la niña se divierta”, habría dicho Mercury y comenzaron a vestirla como un jovencito: chaqueta militar, una gorra, gafas de sol y estaba lista. Acudieron al Royal Vauxhall Tavern, un bar gay en el sur de Londres, sin embargo, fue Freddie quien atrajo la atención de la multitud, que ignoró al chico que se “parecía a la princesa Diana”.
Burlarse de Sid Vicious
Era 1977, Queen y los Sex Pistols se encontraban grabando en los estudios de Sonido Wessex, al norte de Londres. Queen preparaba el News of the world mientras que los Pistols alistaban Never Mind the Bollocks. De acuerdo con una entrevista vieja a Brian May, Vanify Fair afirma que Vicious le dijo a Mercury: “Eres Freddie Mercury, ¿verdad? Estás trayendo ballet a las masas " lo que según May era una crítica de Vicious a una declaración anterior que Mercury había dado en la prensa. Mercury, que no era propenso a burlarse de otros artistas, respondió llamándolo Simon Ferocious, dejando al bajista de los Pistols muy enojado.
El fin con Michael Jackson
En 1983, tras el lanzamiento de Thriller, Queen y el rey del pop planeaban un trabajo en conjunto. Sin embargo, todo se vino abajo y cada parte dio una razón distinta: Mercury aseguró que tuvo que dejar las grabaciones porque Jackson de había empeñado en llevar a una llama al estudio de grabaciones. Jackson dijo que tuvo problemas con la adicción de Mercury a la cocaína. Este último motivo, fue respaldado por Elton John, quien aseguró que hubo una época en la que consumió drogas con Freddie.
En Bicycle Race, de 1978, Mercury tiene una línea que claramente dice “Jawa (Tiburón) nunca fue lo mío, no me gusta Star Wars”. Pero nada más lejano a la realidad, entre 1979 y 1980 Freddie decidió entrar en los hombros de una persona disfrazada de Darth Vader a escena para probar que no odiaba la saga de George Lucas. Con un short diminuto, a veces solía cambiar el disfraz por uno de Superman.
