C laudia Lizaldi posó en su casa con su familia. (Fotos: Héptor Arjona)
Con casi ocho años de relación, Claudia Lizaldi y Eamonn Kneeland compartieron que este tiempo ha sido de diversión, crecimiento y madurez como pareja y ahora, con sus dos hijos Iam, de siete años, y Elah de dos, su consolidación como familia. Platicamos en la acogedora sala de su casa y afirman que el amor, la voluntad, el compromiso y la libertad son las bases que los han mantenido juntos y lo corroboramos durante la sesión de fotos y entrevista en que las muestras de cariño fueron constantes.
Al preguntarles en qué basan su relación el escritor y coach espirutal —quien recientemente publicó el libro Medita Conmigo— no dudó en responder que en el amor; mientras que la conductora del programa de televisión “Grandes Chicos” confirmó: “Sí, en el amor y en la espiritualidad, yo creo que tenemos una relación sólida porque tenemos un camino espiritual común, no en coincidir en la religión, porque ninguno practica alguna religión. Somos dos personas profundamente espirituales con un objetivo en común que es hacer de la experiencia vital que tenemos hoy de nuestra vida, algo que vaya mucho más allá. Lo complementamos con el gran amor que tenemos, nos gustamos físicamente, y hay mucha atracción”. Te puede interesar: Famosas que son amigas de sus hijastros
Para Eamonn ocho años de relación no son nada porque, afirma, van por ochenta, y entonces surgen las risas por la declaración que evita la solemnidad. Aunque admite que su relación, como la de cualquier pareja se transforma con el tiempo. Nos dice que ha aprendido a aceptar a Claudia tal y como es, además de aceptarse él mismo.
“El cambio es una prioridad en nuestra relación. Constantemente trabajamos en la observación y la autocorrección. Sabernos amor, sabernos reír en los momentos de reto es básico, porque cuando me río de mí entonces se aligera la energía. La verdad por más meditación que dé y enseñe, puedo llegar a ser muy enojón y es muy desgastante. Estar trabajando en uno mismo constantemente ha ayudado a darnos estos ocho años de disfrute”, comenta. Claudia agrega: “Lo que dice Eamonn me encanta porque es aceptar al otro, independientemente de no perder el tema de la autocorrección, observación y saber que estamos transformándonos. Cuando nos enojamos terminamos riéndonos o dándonos un abrazo”.
Ceder y perdonar
Parte del pacto entre ambos es ceder y es que como pareja tienen claro que uno de los dos se doblega ante una discusión, aunque Claudia entre risas nos dice que casi siempre es Eamonn quien lo hace y él comenta: “Si ninguno cede, se rompen las cosas y termina la relación. Tu tienes que ser el maestro en tu relación, independientemente que la otra persona tiene que responsabilizarse. Tienes que saber hasta dónde llegar y cuándo ceder o darte la vuelta y regresar más adelante, más tarde”.
Sobre cómo logran conservar su individualidad además de ser pareja, Claudia comenta que han aprendido que todo es perdonable, “que estas relaciones de vengarte por lo que te hicieron, es cuestionar mucho el amor. Ambos coincidimos que estar en una relación porque sí, no vale la pena. Si vas a estar con alguien es porque lo amas y te diviertes, haces el amor, te ríes, porque realmente hay una relación, porque para ser amigos, mejor que cada quien se quede en su casa”.
Eamonn comenta que “en las múltiples ocasiones en las que hemos estado al punto del quiebre, es saber que nuestra relación no es igual a ninguna, entonces hay que saber explorar, adaptarnos, ver la relación como un proceso de autodescubrimiento y fluir. Nos damos esa libertad que nos vuelve a unir y atrapar en las redes del amor”. Además considera que es importante saber que tu pareja está en un proceso de evolución “y si tu también lo estás, permitirse los errores y el crecimiento, así nunca te vas a sentir atosigado o amarrado”.
La admiración es otro ingrediente importante en una pareja por eso Claudia admite que las cosas más sexys que tiene su esposo y lo que más la inspira y mueve “es que es un papá entregado, feliz de estar con sus hijos. En el trabajo admiro que logra crear abundancia cambiando vidas. Me encanta que no es celoso conmigo. Yo he compartido el valor de la comida con él y él conmigo el valor de la música, afiné mi oído musical gracias a él”.
Como mamá, nos comparte que es amorosa, enérgica y entiende a sus hijos Iam y Elah, pues decide seguir su instinto materno y esto le ha resultado muy bien, incluso ha optado por darles todo lo natural, a la fecha dice que sigue amamantando a su pequeña niña. Te puede interesar: Los hijos de famosos que tienen redes sociales
“Hay que reconectarse con los hijos y estar con ellos al cien por ciento, entregarte totalmente para escucharlos y conocerlos de verdad, para educarlos desde el amor”. Y es que ella, como muchas familias, trabaja y pasa horas lejos de casa, (actualmente es conductora de televisión y tiene su página web Mamá Natural), pero ha aprendido a no sentir culpa ni frustración porque les da tiempo de calidad a sus hijos y esto es comprometerse no desde la culpa ni desde la frustración, como bien dice todos trabajamos.
Respecto a la forma de inculcarles valores asegura que los primeros cinco años de la vida de los niños son los más importantes por eso debe existir la conciencia de entender que la educación viene desde casa. “No es responsabilidad de la escuela inculcar los valores, hay que enseñarles a nuestros hijos con el ejemplo, ¿cómo les pides que no mientan si cuando estás en casa y si contestan el teléfono a veces le pides que te nieguen o les ordenas que no tomen refresco y tú lo haces, la congruencia siempre te dará mejores resultados”, afirma.
Y es que la pareja no busca ser perfecta, son tan humanos como cualquiera, sólo buscan ser perfectibles y verdaderos con sus hijos, “con el ejemplo ellos verán una mejor forma para integrarse al mundo desde un lugar más sano”.