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Enfundada en un vestido inspirado en la última reina de Francia y en el corazón de París, Deborah Hung y empresaria mexicana celebró un año más de vida con una fiesta que ella misma organizó en la suite imperial del Hotel Ritz. La festejada compartió en exclusiva con CLASE los mejores momentos de esta glamorosa celebración y todos los detalles que disfrutaron sus invitados.
La fortaleza de María Antonieta, quien fuera reina de Francia en 1774 y una de las mujeres icónicas del siglo XVIII, es la cualidad con la que Deborah Hung se identifica. Teniendo como estandarte el glamour y la imagen de la perfecta reina parisina, la ex modelo y empresaria, originaria de Hermosillo, Sonora, convocó a sus amigos a disfrutar una fiesta de la que ella cuidó hasta el más mínimo detalle y que tuvo como temática la época barroca.
A Deborah le emociona mucho organizar fiestas y otros eventos, pues tanto por su trabajo, como por el de su esposo, Stephen Hung, tienen que socializar mucho: “Siempre estoy organizando todo tipo de eventos en Hong Kong y alrededor del mundo. Decidí hacer mi fiesta en París debido a que estaba con Stephen durante la semana de la Paris Fashion Week y a que yo celebro mi cumpleaños todo el mes”, nos comenta entre risas y agrega que muchos de sus amigos también estaban en París debido a este evento.
Los preparativos
La también abogada nos cuenta que desde hace tiempo tenía la idea de hacer una fiesta temática con una estética particular y elegante y pensó que París era el destino perfecto para esto: “Ya me había quedado un par de veces en el Hotel Ritz y me encanta. La fiesta fue en la Suite Imperial, la más grande del hotel y fue perfecta para el tema de mi cumpleaños”, comenta. Esta habitación está considerada por el gobierno francés como monumento nacional.
La fiesta la planeó con dos meses de anticipación: “Tengo un equipo que me ayuda, pero soy súper detallista y me encanta estar involucrada en todo. Siempre trato de hacer cosas diferentes para que mis invitados se diviertan. Me gusta que no se les olvide la fiesta y que sea toda una experiencia”, y nos explicó que todo lo trajo de Japón, Hong Kong, y algunas cosas de París. Su equipo personal instaló la decoración y lo que más gustó a los invitados fueron las flores con plumas.
Apasionada de los detalles
El tema de la fiesta quedaba perfectamente con la ciudad: “Me pareció ideal para tener el pretexto de que los invitados se vistieran así para la fiesta. Cada uno llevaba su disfraz pero tenía listos algunos para aquellos que no tuvieran el suyo. Deborah hizo una video-invitación muy original que envió a sus amigos e invitados para asistir a su festejo.
Lo que más destacó en el menú fueron los pastries, macarrones y cupcakes. “El pastel también lo diseñé yo, en realidad diseño todo para las fiestas, desde el lugar y las invitaciones, hasta la comida que se va a servir”. El menú fue inspirado en las tea parties, aunque también se sirvió champagne para darle un toque girly.
Durante el festejo los invitados degustaron galletas, mousse de chocolate, madalenas, tartaletas, eclairs, crudités, jamón ibérico y quesos. Deborah comentó: “No me gusta hacer los típicos cocteles, en la fiesta hubo vinos, jugos de frutas espumosos y dos cocteles deliciosos especialmente hechos para la noche: el Rossini y el Bellini”.
Lo mejor en la fiesta
Deborah es tan especial para sus amigos que muchos de ellos viajaron desde Estados Unidos, Suiza, Grecia, Rumania, entre otros lugares del mundo: “Una de mis amigas viajó especialmente desde Brasil para mi fiesta”. Entre las personalidades destacaron Renzo Rosso, Daniel Lismore, Chris Pitanguy, Tania Derani, Brian Atwood, Tamara y Michael (de Ralph & Russo), la diseñadora Yulia Yanina y Guilherme Siqueira (novio de Domenico Dolce). “Tuve invitados que son políticos y empresarios pero no puedo compartir nombres o fotos”, explica. También asistió la princesa Tania de Bourbon (descendiente del rey Louis XIII y María Antonieta), quien es consejera especial de los diseños en el hotel que los Hung están construyendo. La suite estuvo decorada con las fotos de un photo shoot que ella planeó de acuerdo al tema de la fiesta, el cual hizo previamente y en el que, asegura, se divirtió mucho. La música que amenizó la noche fue pop.
El vestido
“Yo diseñé mi vestido con un sastre de mi confianza que conozco desde hace tiempo, los zapatos los había comprado en una colección de Dolce & Gabbana Alta Moda, tienen oro, bordados y piedras preciosas. Stephen se mandó a hacer los pantalones, pero la chaqueta, el chaleco y los zapatos eran de D&G. Muchos invitados también eligieron usar D&G en sus atuendos. Mi hairstylist fue el mismo que le hizo el cabello a Kirsten Dunst en la película ‘Marie Antoinette’”, (Odile Gilbert).
Respecto a los obsequios que recibió nos dijo: “Todos mis amigos me dieron muchísimas flores y regalos, además de que me hicieron llegar sus buenos deseos. El regalo de mi marido no se los puedo contar, aunque sí les puedo decir que fue muy especial”, nos comenta. Uno de sus amigos cercanos es el diseñador John Galliano quien también le hizo llegar un arreglo floral a su suite.
Primicia sobre su nuevo proyecto
Uno de los lugares favoritos de estos dos enamorados en la Ciudad Luz es el restaurant L’Ambroisie, en Place des Vosges: “Es un restaurant al que mi marido y yo vamos desde hace algunos años, nos encanta por su chef, Bernard Pacaud, la calidad del servicio y el ambiente. Este restaurant ha tenido miles de propuestas para abrir una locación y finalmente los convencimos para que abran otra en nuestro hotel (The 13, en Hong Kong), el cual estará a cargo del mismo chef”, nos adelanta Deborah emocionada. Su proyecto ostentará el título del “hotel más lujoso del mundo”, cuyo precio por noche será de 130,000 dólares y contará con su propia flotilla de Rolls-Royce Phantoms para uso de los huéspedes.
