Christina Lima y Rogelio López nos compartieron su hermosa historia de amor. (Fotos: Héptor Arjona)
Nos invitaron a su casa en la Ciudad de México, la entrevista se dio en un ambiente muy relajado en el que, en todo momento, Christina y Rogelio tuvieron muestras de cariño entre ellos.
Recuerdan haberse visto por primera vez gracias a una conocida en común, que hoy se ha convertido en la mejor amiga de ambos. “A los pocos días de conocerme, ella me dijo: ‘Te voy a presentar a un amigo que queda perfecto contigo’ y así fue”, dice Christina. Sin embargo, desde ese comentario hasta el día en que recibiera su anillo de compromiso, pasaron nueve años de encuentros y desencuentros para que sus vidas se unieran. “Un buen día, cuando yo ya tenía un tiempo sin una relación, él llegó y me dijo que también ya estaba soltero y quería saber qué iba a pasar con nuestra relación, que ya era momento de echar toda la carne al asador y tomar la decisión de hacer las cosas bien. A partir de ahí, decidimos vivir juntos, compartir los perros, la casa y todo. Ha sido una experiencia increíble; hoy, no concibo mi vida sin él”, dice la bride to be con una gran sonrisa.
El reencuentro
Christina comenta que en el momento en que murió su papá, Rogelio volvió a aparecer en su vida, y ella menciona que esto fue muy mágico: “Yo puedo garantizar, por encima de todo, que quien lo regresó a mi vida fue mi papá. De la noche a la mañana llegó sin que nadie lo llamara”. Por eso, asegura que ambos creen que su reencuentro no fue una casualidad. Incluso, nos dijo que Ivania, la hermana de Rogelio, también opina que su papá, el señor Rogelio López, campeón 2006 de la NASCAR México, fallecido hace 13 años, se puso de acuerdo en el cielo con el papá de Chris para juntarlos.
Comentan que la gente se preguntaba cómo era posible que después de tanto tiempo ahora estuvieran juntos y ellos afirman que esto se debe a un milagro inexplicable. “Como que no había una explicación tangible de lo que estaba sucediendo, y es cuando me viene al corazón que fueron ellos los que nos unieron. Fue algo mágico, y estamos seguros de que ellos dos están involucrados en esto”, agrega Chris.
Claves del éxito de su relación
Acerca de las cosas que les han funcionado para llevar una relación exitosa, nos dijeron que los ingredientes principales han sido la paciencia, las risas, la comunicación y la sinceridad, “Decir la verdad ante todo es básico, elegir las batallas es lo imprescindible”, afirma Roger.
Además nos confesaron que no les gustaría que la monotonía fuera una constante en sus vidas, por lo que los dos siempre tratan de ponerle “sal y pimienta” a sus días, para que eso no suceda. Otro básico en su relación es que él le presta atención a todo lo que ella le cuenta, no importa qué tan insignificante sea, Roger escucha, cosa que Chris aprecia, pues demuestra el real interés por todo lo que tenga que ver con ella.
En cuanto a sus gustos y hobbies, a Christina le gustan mucho los lugares en donde hay playa y sol; sin embargo, a Rogelio le gustan más los sitios lluviosos. Con el tiempo, para ambos, las vacaciones perfectas son aquellas que incluyan una cabaña, lluvia y estar juntos sin nadie alrededor.
Y es que aunque Rogelio asegura que años atrás se caracterizó por ser un hombre muy fiestero, ahora su momento favorito del día es llegar a su hogar y compartir el tiempo con su prometida, pues aseguran que se complementan al cien por ciento.
También nos comentaron que las pasiones que comparten en pareja son: andar en moto e ir al cine. “Los dos somos muy detallistas, por ejemplo, puede haber un día que yo llegue sin ninguna razón en especial y encuentro toda la casa apagada, con velas alrededor, bueno esos son mis mejores días con Chris, aunque la verdad, todos los días son increíbles al lado de ella” , comentó el piloto de profesión.
Acerca de lo que conquista a Rogelio de Christina, nos dijo: “En lo profesional la he visto evolucionar en todos los aspectos, ya que en un principio ella se dedicaba a la nutrición, pero hoy en día, ha evolucionado de lo que empezó haciendo a lo que hace actualmente (dirige Medicalima y es coach en Psicología de la Alimentación y Nutrición Funcional) y eso es de admirarse. Pienso que el ámbito de la nutrición integrativa era un fenómeno poco común en México”. Además agregó que admira las ganas y el ímpetu que le pone a todo lo que hace, pues siempre la ve actualizándose, leyendo y preparándose, “así es el mundo, ahora todo va muy rápido. Creo que me enamoré de ella porque soy un apasionado de lo que hace y soy su fan, ya que he visto los resultados en mí y en muchísima gente”.
Por su parte, Christina nos relata: “Definitivamente lo que más admiro de él es la congruencia que tiene con su profesión y con su vida, es determinante, si va a hacer algo, lo hace bien; si tiene que prepararse, se prepara; si tiene que concentrarse, lo hace; no toma las cosas a juego”.
La health coach además nos confesó sentirse más enamorada que nunca, pues descubrió en él un hombre honesto, sincero y recto. “Si me preguntas en concreto qué amo de mi pareja, te diría que es su carácter, su determinación; es una persona sumamente congruente. Creo que los dos hacemos una mancuerna perfecta”.
La pedida de mano
El verano de la pareja comenzó cada quien por su lado. Rogelio emprendió el viaje con sus amigos Alberto, David Tame y Fabio González, al Gran Premio de Hungría y Alemania. En esos días el grupo de amigos visitó Budapest, Praga, Berlín, Frankfurt y Heidelberg.
“Después del Gran Premio de Alemania me fui a Roma y ahí me encontré con Chris; ella por su parte había viajado unos días con su amiga Cata Arango a Grecia”. Explica Rogelio que nunca le platicó lo que harían durante el viaje. En un principio, le dijo que rentarían un coche para salir de Roma y viajar por toda la Costa Amalfi hasta llegar Capri. “Antes de salir de México le dije que se había complicado todo, porque mi licencia estaba vencida y que mejor llegando a Roma veíamos que hacer”.
Ya en Roma los dos se fueron en un ferry a Sorrento, cuenta Rogelio: “Empezamos a caminar por la marina, hasta que llegó una lanchita por nosotros y vimos el velero y le dije: ‘Bienvenida a tu casa por los próximos días’, ahí nos esperaba el crew”. Explica el novio que la clave de que Chris no sospechara nada fue que tres de sus amigas entre ellas, Pilar Ramírez, estaban de vacaciones por allá, y él sugirió invitarlas a ir a Positano con ellos. Durante estos días en el velero se veían para comer o cenar; “Esto ayudó a que ella no sospechara la gran sorpresa que le esperaba en Capri; también las recogimos pero ya justo cuando se acercaba el atardecer, las tuve que bajar en la próxima marina sin darles explicación alguna”.
Mientras disfrutaban del atardecer, Rogelio le dijo que los acompañantes del barco traían un globo aerostático para encenderlo y pedir un deseo, “cuando lo encendió me dijo que pidiera un deseo, pero en voz alta, y le dije: ‘Quiero estar contigo toda la vida’ y le pregunté: ‘¿Y el tuyo?’, en ese momento me dijo: ‘¿Te quieres casar conmigo?’ sacó el anillo y nos trajeron champagne”, recuerda Chris.
Roger confiesa: “Mi sentir en el momento que le pedí matrimonio obvio eran un poquito de nervios pero creo que hasta eso lo sé controlar súper bien, cuando le puse el anillo fue muy chistoso porque ¡nunca me respondió que sí! y lloramos los dos”.
Después del gran momento navegaron toda la noche hasta Sorrento y bajaron a cenar. La prometida confiesa que no se lo esperaba, que sí lo había pensado hace mucho, pero “Rogelio hizo todo para que ni me lo esperara”. Comentan que ha sido el mejor verano de su vida y que están muy agradecidos por cada minuto juntos. Los enamorados comenzaron sus vacaciones como novios y las terminaron como futuros esposos. Rogelio dice que esta gran sorpresa ya la tenía preparada desde hace dos meses.
Boda en puerta
La pareja nos aseguró que en este momento de su relación se encuentran muy unidos, pues su compromiso se dio en el momento adecuado y de forma especial, ya que a él le gusta darle sorpresas y sus vidas se componen de pequeños detalles que durante el día se dan el uno al otro, es por eso que al pedirle su mano no podía ser de otro modo.
Acerca de la fecha de la boda nos comentaron, con mucha emoción, que tienen pensado que sea el 25 de febrero de 2017, en un jardín en la Ciudad de México y además quieren a los expertos en eventos Alfonso Helfon y Jaime González para organizarla, ya que tienen una a excelente relación con ellos y confían en su trabajo para llevar a cabo su gran evento, el día de su boda.